Respirando,
con energías y ganas de crecer. Así ha llegado CIPSA a la tercera edición de
los 'Encuentros con...'. Y qué mejor modo que abrir esta nueva etapa de la mano
del profesor de Meditación e Instructor Zen Miguel Ángel Rodríguez. El Espacio
Fraile y Blanco aportó, como siempre, su calidez y cercanía en una tarde otoñal
que respiraba más a verano de regalo. El trabajo impecable de Jesús Mazón como
comunicador y relaciones públicas siempre facilita este tipo de eventos. Son
muchos años de trabajo en paralelo, de palabras y reflexiones compartidas. Él
es uno de los grandes cómplices en el vigésimo aniversario del centro, que
empezaremos a celebrar en próximas fechas.
Sabíamos que
la respuesta sería grande, el trabajo de difusión en medios de comunicación y
las ganas de aprender en un tema tan atrayente como desconocido hacían el
resto. Al final, un centenar de personas se convirtieron en los perfectos
oyentes de 'Mindfulness y Meditación en la Vida Cotidiana'. Ángela Carrera,
directora de CIPSA, fue la encargada de guiar el encuentro. Volcó su
experiencia personal como alumna de Rodríguez para extraer lecciones y
alimentar curiosidades. Desde el primer momento, Miguel Ángel Rodríguez, ex
presidente de la federación de comunidades budistas en España, transmitió en
cada respuesta su calma y espíritu zen. Y fue entonces cuando comenzó a soltar
perlas, ante la atenta mirada de los presentes. “Estamos muy lejos de lo que somos. Muy separados de nosotros
mismos”, dijo. Su receta pasa por pararse y respirar. Entendiendo el
proceso de “la Meditación como un ejercicio de intimidad. Te sientas y te sientes". Pero, teniendo en cuenta que "no se trata de parar la mente”.
Durante
la charla apuntó múltiples beneficios de la Meditación en sí misma, pero
también describió el potencial que cada uno tiene y desconoce. “Tenemos una capacidad absoluta de
solucionar las cosas desde lo que ya somos. Pero hay que tener confianza”, expuso
Rodríguez. Aunque alertó de los efectos negativos del 'yoísmo'. “Si toda nuestra historia está basada
en el yo, te
va a hacer daño. Has de tener en cuenta que todo cambia”. Y cada
frase se convertía así en un nuevo 'mantra'. Desmitificó el Budismo visual -"yo
nunca voy de naranja ni enrollado en una capa"-, tal y como lo asociamos,
así como otras ideas extendidas. Hablando del deseo explicó que “en el Budismo no hay ni bueno ni malo, pero el deseo en sí no es malo. Es
un movimiento vital, una
energía creadora”.
En el
propio título del encuentro se apuntaba la posibilidad de trasladar la Meditación
a la vida cotidiana y una serie de ejemplos sirvieron para entender el
beneficio de aplicarla. Importante que los pies estén posados en el suelo,
sentir esa energía y tener conciencia de la respiración, la base de todo. “Aprovechemos para respirar cuando el
semáforo se pone en rojo o al comer, antes de ir de cabeza al plato”, dijo. Fue
entonces cuando surgió un ejercicio de Meditación guiado por Rodríguez, escasos
minutos, que sirvieron para una desconexión conjunta. “La Meditación en grupo funciona mejor”,
explicó. Al
tiempo, Ángela Carrera comunicó que en breve se abrirá un Grupo de Meditación en CIPSA, dirigido por Miguel Ángel Rodríguez. Próximamente se informará sobre
días y horarios. La sensación final fue de haber incorporado una lección, un
testimonio de bienestar y búsqueda interior. Respirando, respirando. Así
llegaremos al próximo miércoles 26 de Noviembre, segunda cita de estos
'Encuentros con...'. Lo protagonizará el Dr. Carlos San Martín y 'Veinte años
de historias de amor... y desamor' será su aportación a un ciclo que respira en buena compañía.
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