En sentido amplio, una red social es una estructura social formada por personas, grupos de personas o entidades conectadas y unidas entre sí por uno o varios tipos de relaciones tales como amistad, parentesco, intereses comunes o que comparten conocimientos. Son herramientas realmente nuevas cuyo uso masivo durante los últimos años ha hecho creer que llevan existiendo una eternidad. Desde sus inicios hasta hoy, han cambiado muchos comportamientos, tanto dentro de las redes sociales, como las formas en las que son utilizadas y se les saca partido de ellas.
El
funcionamiento y las características de las redes sociales cambian adaptándose
a la tecnología de la que disponen. Esta tecnología transforma el modo de comunicarse
y de relacionarse, permitiendo ampliar y desarrollar la propia estructura de la
sociedad que se organiza en forma de redes. Un 45% de los internautas participa en alguna red
o comunidad de temática específica, existiendo un ligero predominio femenino en
Facebook, mientras que hay más usuarios masculinos en las plataformas de comunicación
"tradicionales" (Youtube, foros y blogs), así como en LinkedIn y
Twitter.
Los cambios en las relaciones sexuales y sentimentales en red
Desde
aplicaciones que nos geolocalizan y nos muestran a otros usuarios dispuestos a tener sexo cerca de nosotros hasta
herramientas que nos permiten hacer saber al mundo que acabamos de practicarlo. Internet
no sólo sobrevive del porno, son los propios usuarios los que de mil maneras
distintas utilizan la red para hacer contactos, buscar nuevas formas de sexo y practicarlo sin tocar más piel que la de
la funda del teléfono
Aún
hay quien echa de menos aquellos tiempos en los que para conseguir una cita tenías que esperar a
que el chico o la chica te llamara al teléfono fijo de tu casa. Dicen
que la incertidumbre de si te había llamado o no al llegar a casa después de
una larga jornada era emocionante, excitante e insustituible. Te
guste o no, los tiempos cambian, las tecnologías avanzan y lo ideal es que le
saquemos partido a esos avances.
Y
eso es lo que estamos haciendo. Porque ahora llegamos
al sexo mucho antes gracias a las redes sociales. Se
trata de lo que algunos llaman "intimidad digital",
y se refiere al estrecho vínculo de confianza que se establece entre dos
personas cuando se comunican a través de las redes sociales, especialmente
Facebook.
Conoces
a un chico o chica, lo agregas a tu cuenta de Facebook, y si hay conexión, en
pocos días podrás retozar entre las sábanas como si hubieras cumplido ya las
citas previas al sexo, si es que sueles planteártelas. Pero
no todo es sexo, y las redes sociales cambian nuestras costumbres en todos los
ámbitos de las relaciones sentimentales.
El
sexting, o enviar mensajes de
texto o fotografías de contenido sexual, es una tendencia que se está extendiendo rápidamente entre las parejas gracias
a la aplicación móvil Whatsapp. Otras
curiosidades acerca de las relaciones de pareja se desprenden del uso de las
redes sociales. Un
gran número de mujeres reconoce indagar en el perfil social de
las ex novias de sus parejas, curiosidad que no afecta tanto a
los hombres.
En
cambio, hombres y mujeres van a la par en cuanto a investigar en el perfil de
sus parejas, desentrañando sus cambios de estado. Por
no hablar de las rupturas que se producen
mediante un whatsapp o un mensaje en Facebook, algo que por mucho que cambien
los tiempos nos seguirá pareciendo una actitud muy poco elegante.
Cuidado con la intimidad
digital
Si
bien es cierto que a través de las redes sociales se puede conseguir un grado
de confianza más rápidamente, también conviene tener cuidado con los
espejismos, especialmente si la relación está empezando y no os conocéis
demasiado.
Una
cosa es conseguir una cita mucho antes, o llegar al sexo más rápido, pero la verdad es que
tal vez no conozcamos al chico o a la chica que tenemos al otro lado del muro
tanto como pensamos. Por
eso te recomendamos mucho cuidado, porque en esto de los ciberligues no es oro todo lo que reluce. Así que procura
tener las cosas claras y establecer las reglas del juego.
Carlos SAN MARTÍN
Doctor en Medicina. Sexólogo. Psicoterapeuta. Coordinador de CIPSA
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